LOCURA. GRAN LOCURA
Será el domingo, a una hora inusual cuando cruce las calles -pocas calles- por segunda vez en casi nada de tiempo. Yo voy a estar allí, a pesar de que no sé que me une a Él. Será una de esas cosas que no se saben explicar; serán esas cosas que nos pasan a tantos y tantos sevillanos: que sin ser parte de su gran familia, Él es algo nuestro.
No se trata, en este caso concreto, de estar apuntando a un enorme listado y pagar una cuota anual. Tampoco se trata de tener un compromiso ineludible cada viernes del año con Su Talón. Y mucho menos la obligación de vestirse de negro en una noche especial. Pero sí que hay algo que une, que nos une a ¿todos?... Sí, me atrevo a decir que a todos.
No me imagino aún cómo será Su Rostro a la luz potente del día. Ni el movimiento de Su Túnica con el calor del mediodía. Ni el reflejo de Sus Potencias, si en algún momento el sol se asoma para ser nublado por Su Silueta…
No se trata, en este caso concreto, de estar apuntando a un enorme listado y pagar una cuota anual. Tampoco se trata de tener un compromiso ineludible cada viernes del año con Su Talón. Y mucho menos la obligación de vestirse de negro en una noche especial. Pero sí que hay algo que une, que nos une a ¿todos?... Sí, me atrevo a decir que a todos.
No me imagino aún cómo será Su Rostro a la luz potente del día. Ni el movimiento de Su Túnica con el calor del mediodía. Ni el reflejo de Sus Potencias, si en algún momento el sol se asoma para ser nublado por Su Silueta…
…tan sólo imagino, presiento y deseo el silencio de cuando Él pasa.
Poco espacio tendremos para repartirnos los muchos que acudiremos. Sé de sobra que la bulla será en todos y cada uno de los lugares por donde horaden Sus Pies desnudos. No importa, porque sabemos que Él llega a cada rincón donde alguien le clave su mirada.
Porque aunque sean muchos los que se agolpen a Su paso, yo me sentiré a solas con Él, como me sucede siempre que voy a verle a Su Casa, en esas horas extrañas en las que sé que no me voy a encontrar con nadie.
No llevará la altura de su canasto, sino que estará más cerca, más humano si cabe por ir tan a pie como todos. A sólo unos metros.
En la calle, el domingo, con luz, mas cerca de mí… ¡y a solas con Él! ¿No es para volverse loco?
5 comentarios:
La verdad es que mañana va a ser un día bastante emotivo.
En mi caso, llevo cerca de 20 años saliendo de nazareno con mi hermandad, Los Gitanos, es decir, desde entonces no veo al Señor de Sevilla en la calle.
La última vez que recuerdo haberlo visto estaba junto a mi abuelo, que ya lleva varios años fallecido. Así pués, creo que mañana van a aflorar muchos recuerdos, muchas vivencias y, por supuesto, muchas emociones, aunque sea por la mañana y aunque sea casi el mes de mayo.
Saludos.
A mi me pasa igual que mi amigo DU GUESCLIN, en mi caso en la Ezperanza de Triana llevo saliendo 20 años.
En fin una estampa que no perderse ..... y de día .......
En fin la Canina seguirá cavilando ........
Todo el que llega hoy a la tasquita viene contando lo emotivo y entrañable que ha sido este traslado.Que pena que me lo haya perdío...
¡Un saludasso!
Desde las 10.30 estuve dando vueltas por el centro con los niños montados en el coche y me tuve que volver sin ser capaz de dejarlo en ningún sitio.
Las fotos impresionan.
Dicen, cuentan, que fue precioso...
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