martes, 27 de enero de 2009

MARTA


DESAPARECIDA
MARTA DEL CASTILLO CASANUEVA
17 AÑOS DE EDAD

DESAPARECIÓ EN SEVILLA LA NOCHE DEL SÁBADO
TRAS SALIR CON SUS AMIGOS

SI ALGUIEN LA VE, POR FAVOR COMUNÍQUELO A LA POLICÍA O A LOS TELÉFONOS

610.742.839 - 954.417.922

6 comentarios:

aiNOha dijo...

Ojalá aparezca pronto, sana y salva.

besitos

Antonio dijo...

Las noticias que llegan están convirtiendo la situación en más que misteriosa... lo que hace aumentar exponencialmente el sufrimiento de los que la quieren.

La pista buena tiene que aparecer y detrás una explicación. Y ella.


Antonio

ANTONIO SIERRA ESCOBAR dijo...

Mi querido Hermano; me temo lo peor; esto viene siendo una lotería macabra y a esta familia que somos todos, le ha tocado el ·gordo". Son cuatro días ya...mucho cuidado con esas personas de su círculo de allegados, incluso familiares; cuidado con los lobos disfrazados de corderos -los primeros que se rompen las vestiduras con la desaparición- los de lágrima fácil, los que van de víctimas sospechosos siempre de no levantar sospechas. La triste realidad es que la realidad misma supera a la ficción. Ojalá, me equivoque contigo, querida LAURA y esta angustia que sentimos todos los padres se quede sólo en un susto, un terrible susto. TE ESPERAMOS, mi alma.

Verdial dijo...

Terrible. Mi hija está muy afectada, pues aunque es bastante menor, tenía conocimiento de ella a través del Tuenti por ser la amiga de un amigo.
Miedo me dan a mí estas cosas, y mira que yo la tengo bien controlada, pero siempre hay algo que se escapa.
Lo que deben estar pasando esos padres es realmente atroz, más aún cuando el tiempo pasa y no aparece.
Yo, y como Natural de Sevilla, también me temo lo peor, y ojaá me equivoque, que una criatura no merece esa situación, ni sus padres ni sus familiares. No es justo.

Un abrazo

Híspalis dijo...

Pasan los días y no sabemos nada de ella. Ojalá la historia tenga un final feliz. Ojalá.

Un abrazo Miguel.

el aguaó dijo...

La Esperanza es la que nos queda. La Esperanza nunca se pierde.

Ojalá...

Un abrazo amigo Miguel.